La intensa atención del Dr. Sala y su equipo en el postoperatorio hacen que las complicaciones sean algo inusual.
Iniciamos la deambulación a las 12h, haciendo ejercicios respiratorios para evitar las atelectasias y neumonías, minimizando el riesgo de infecciones. Tras comprobar la ausencia de fugas, instauramos una alimentación oral líquida fisiológica y progresivamente hiperproteica para facilitar la cicatrización de las suturas. La disponibilidad y el contacto son continuos y permanentes con el Dr. Sala y la dietista durante el postoperatorio hospitalario y la convalecencia domiciliaria.
El empleo de material quirúrgico de última generación, tanto en el quirófano con el uso de grapadoras de autosutura específicas como durante el postoperatorio con el empleo de medias neumáticas antitrombóticas, hace que el procedimiento sea más confortable y se reduzcan los riesgos todavía más.
Consejo
La mejor información se obtiene de una larga y fluida conversación en la consulta, apuntando las dudas para una posterior revisión. Ningún paciente debe someterse a una intervención bariátrica o metabólica sin una información completa y detallada, unos estudios médicos previos evaluatorios, conociendo y asumiendo los posibles riesgos (consentimiento informado específico). Siempre se debe buscar equipos multidisciplinarios sólidos y solventes con contrastada experiencia, y que aseguren un seguimiento adecuado a largo plazo.
El paciente ingresa el mismo día de la intervención, con profilaxis antibiótica y tromboembólica. La intervención y el postoperatorio transcurren con normalidad, y se da el alta a las 24h postoperatorias, incluso el mismo día con CIRUGÍA SIN INGRESO en casos determinados, con buena tolerancia oral e información dietética para el cuidado domiciliario hasta las revisiones posteriores.
Salvo excepciones, los pacientes se recuperan bien de la anestesia y pasan a su habitación, sin necesidad de UCI.
Todos los pacientes llevan pautada con heparina de bajo peso molecular y protección gástrica.